Durante el año 2010 acometimos esta obra de rehabilitación integral en Algerri, un pequeño pueblo cerca de Lleida. El proyecto partía con la idea de rehabilitar una casa de pueblo de tres alturas (planta baja, primera y falsa) en una vivienda unifamiliar para residencia habitual. La singularidad del edificio era que resultaba de la unión de dos casas de 3 metros de ancho por 15 metros de profundidad. Reformas anteriores realizadas sobre la base de la doble vivienda conformaban dos sectores con sus respectivos pasillos interminables  y habitaciones sin ventanas interiores, y apenas un pequeño patio de luces de 80 cms de profundidad, que gracias a la falta de altura del vecino, aun daba algo de luz, casualmente bien orientado al sur. La falsa no tenía mayor uso que almacén y secadero.

 

Como para hacer una vivenda unifamiliar contamos con espacio de sobra, la intervención se  oriento a:

– Retranquear el edificio por detrás formando una fachada orientada al sur de nueva construcción desde la altura del piso primero, y crear un patio a la altura de esa primera planta.

– Mantener la planta baja como está, dejando como zonas de servicios (lavadora), almacenaje, despensa, taller, y sala de máquinas.

– Mantener por concepto  la fachada original a la calle con la misma tipología.

– Establecer en primera planta, salon, cocina y comedor diáfano, habitación, y baño. En segunda planta tres habitaciones y baño, y aun arriba una pequeña habitación y pequeña terraza como observatorio astronómico.

La intervención se realizó con el criterio de incorporar elementos aislantes suficientes y aprovechar la inercia térmica de los muros portantes medianeros hechos de tapia. Se aprovechó la fachada sur para incorporar mayores acristalamientos.  Se conservaron los de la fachada norte, para conservar la tipología de la fachada, pero con carpinterías que alcanzaban coeficientes menores de 2,0 w/m2ºC a base de cristales dobles y bajo emisivos. En esta foto podemos ver tanto el patio que hemos obtenido como, cercano al solsticio de invierno, el sol que entra en la casa con alegría.

 

Constructivamente aplicamos nuestros habituales sistemas de forjado de vigueta de madera y tabla, corcho granulado, aglomerado con yeso, cal o suelto, según el caso.  Suelos de madera donde se pudo, y pinturas naturales, al silicato y aceites, de Casa Ecológica. En este caso puertas de pino al natural, tratadas con aceites, y suelo de eucalipto, nacional, pulido con aceite para suelos de Casa Ecológica. En esta otra foto podéis ver como restauramos el forjado utilizando la técnica original. Esto se hizo en el 40% del forjado de esta planta. Podéis ver más sobre esta técnica pinchando aquí o en la foto.

  

Reciclamos toda la tierra que se pudo para reconstruir porciones de muro o refuerzos, y también se reciclaron las principales vigas de madera. Notable resultó ser la reutilización de una de las vigas de la cubierta para abrir el espacio en el salón, para unir las dos unidades constructivas en un gran espacio de 5,0 x 6,3 metros. Aquí podemos ver esta curiosa solución constructiva para reducir  los apoyos de la viga y hacerlos semiempotrados.

Aprovechamos la incorporación del acceso a la terrazita de arriba para crear un nuevo espacio, y un juego de luces, dado que en invierno el sol incide fuertemente en esta zona.

 

En esta última foto, el acceso por la escalera, lo diseñamos sectorizado en tres tramos de bovedas escalonadas. Favorecemos el efecto de las luces que mencionamos y a la vez creamos un juego de volumenes muy originales, tanto en la escalera como en la habitación contigua, que muestro a continuación.

  

Nuestros típicos acabados de mortero de cal fratasado, y pintados al silicato. La textura y sensación de bienestar son insuperables. Tanto en interior como en exterior. Tengo una entrada sobre mortero de cal aquí.

 

Las fachadas resultantes. Acabadas al silicato.

 

 

 Para la cocina se dejó una pequeña área alicatada y se montó una modesta pero funcional cocina de IKEA junto con muebles reutilizados.

 Esta habitación queda debajo de la habitación y terrazita. Para conservar las alturas de fachada, tuvimos que apurar bastante la altura del techo. Aun así, queda una habitación muy acogedora gracias al uso de materiales naturales.

Esta habitación queda bajo cubierta con una diferencia de alturas considerable, da más juego a la hora de amueblar.

Para acceder a la terraza subimos a una pequeña habitación muy coqueta, que nos permite disfrutar de una buena vista del valle, así como observar las estrellas.